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HACIA MI PENTECOSTES

50 días de Renovación Personal

Día 27 - Trayendo un Derramamiento (Entrega Cruenta)

 “Iban por el camino cuando alguien le dijo-Te seguiré donde quieras que vayas -

Las zorras  tienen madrigueras y las aves tienen nido, respondió Jesús,

pero el hijo del hombre no tiene donde recostar su cabeza.”

Lucas 9:57,58

Jesús no deja de sorprenderme, es tan claro, tan verdadero, que esta respuesta, trasgrede cualquier técnica de persuasión. Él es el camino, la verdad y la vida, y para que lo sigamos, no necesita inventar nada, es más, Él habla desde la  autoridad única de su entrega sacrificial por amor.

En este año de discursos políticos, oímos mentiras disfrazadas de verdad, sospechosas verosimilitudes, es más, si algún de estos asesores de discurso político, escucharan a Jesús, se harían cruces, a causa de sus palabras. Sería imposible, para ellos entender, como alguien pretende que lo sigan, hablando un idioma de Entrega Sacrificial, aunque no es otra cosa que amor, en su máxima expresión.

En este relato Jesús, acaba de ser rechazado por los habitantes de un pueblo samaritano, que rehusaron recibirlo, hospedarlo; seguramente experimentó la entrega dolorosa de sus sentimientos,  más aún, corrigió a sus discípulos que estaban furiosos por el hecho y querían venganza divina. Es que Él se entregaba cada día, moría cada día. Es por eso que para seguir a Jesús, debemos transitar la Entrega Cruenta. Cruento, refiere a morir, sí morir! ¿Estamos dispuestos a morir a nuestro carácter, a morir a nuestros planes, a nuestra idea de felicidad, a la comodidad, a encajar en esta sociedad? Es que si queremos el Derramamiento de Dios sin medida, debemos estar diariamente expuestos a su misma muerte. ¿Cómo es esto? Vea lo que el Apóstol Pablo dice en Corintios, “Llevando en el cuerpo siempre la muerte de Jesús para que también la vida de Jesús se manifieste”. ¿Queremos la vida de Jesús manifestada en nuestra Vida, y que esto cambie mi familia, mi barrio, mi trabajo el circulo de influencia y mas allá? Entonces, debemos morir cada día, entregando lo que está vivo en mi, aunque duela.

Señor, hoy decido entregar cada área de mi vida que no he rendido, sé que en este proceso de morir a mí mismo, tu comenzarás a crecer en mí. Gracias por tu Entrega total, sin retroceso y sacrificial, porque por ella yo tengo vida, te amo Jesús. Amén

Podcast : 

Video :  https://youtu.be/afYMd68zFvQ