En el día de ayer retome las caminatas. Aunque estuve caminando en las vacaciones no eran de la intensidad de los recorridos matutinos. Así que tipo 07:00 AM me dispuse a salir y cuando estoy por levantarme una voz que me dijo: Sabes que podes empezar mañana ¿no?. Con resolución sabiendo que era la misma voz que había escuchado el Lunes me levanté y me apresté a salir. Cuando estoy en los primeros 500 metros, otra vez la voz: Empezá despacio, no te fuerces inútilmente. Al rato, otra vez la voz: ¿Si haces 2 kilometros está bien? Ahí me animé y le respondí: 2 km hacía caminando por la playa!!! Y entonces la voz me dijo: No es lo mismo caminar en el mar, con el fresco, los pies en la arena que hacerlo acá.
Esa voz continuó por todo el trayecto de los 4 kilometros de ayer y apareció hoy en mis 5 kilometros, mientras busco llegar a mis 6 kilometros en una hora nuevamente. Esa voz me llama a menos, a que tenga lastima de mí, a que me dedique primero a escribir el devocional y después a caminar cuando el sol ya salió. Me pide que duerma un poco más, pero también me dice que no trabaje tanto, que no ore mucho… esa voz habla continuamente y lo único que quiere es que yo no adquiera disciplina en la vida.
¿Soy solo yo el que la escucho? ¿O vos también la oís?
"Romanos 7:22 Pues me complazco en la ley de Dios según el hombre interior, 23 pero advierto otra ley en mis miembros que lucha contra la ley de mi razón y me esclaviza a la ley del pecado que está en mis miembros."
Pablo tenía una “voz” que lo llamaba a servir al pecado, que le proponía vivir una vida de acuerdo a sus impulsos… Esa “voz” interna es común a todo hombre. En teología me enseñaron a llamarla “viejo hombre”, es un llamado continuo a mi corazón que satisfaga mis apetitos naturales, que esquive los mandamientos de Dios. Es una “voz” que Jesús la escuchó en la boca de Pedro cuando este le dijo que tuviera compasión de si mismo y no marchara a la cruz. A todas luces es un pedido de alguien que ama!!! Sin embargo, Jesús identificó la fuente de semejante “voz”.
Mt 16:23 Pero volviéndose El, dijo a Pedro: ¡Quítate de delante de mí, Satanás! Me eres piedra de tropiezo; porque no estás pensando en las cosas de Dios, sino en las de los hombres.
La respuesta de Jesús a Pedro y su “voz”, es la respuesta que nosotros debemos tener con toda aquella voz que nos llame ir a menos en la vida cristiana. Es la respuesta de Pablo a los hermanos que le ruegan que no vaya a Jerusalén para salvaguardarse…
Hch 21:12 Al escuchar esto, tanto nosotros como los que vivían allí le rogábamos que no subiera a Jerusalén. 13Entonces Pablo respondió: ¿Qué hacéis, llorando y quebrantándome el corazón? Porque listo estoy no sólo a ser atado, sino también a morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús. 14Como no se dejaba persuadir, nos callamos, diciéndo nos: Que se haga la voluntad del Señor.…
Cuando la “voz” esa de la que te hablo te anime a ser menos santo, a ser más “normal” y un poquito más “mundano”, cuando esa “voz” te diga que podes dejar de orar o que no leas tanto la Biblia, que no te congregues todas las reuniones, ni des el diezmo que con un 8% está bien… Cuando esa “voz” te anime a que prediques solo con el ejemplo, que no seas cargoso con tu fe, que dejes pasar la conversación sin defender tu creencia… Cuando esa “voz” te hable… Repréndela en el nombre de Jesús y aférrate a lo que Dios te ha demandado. Nunca estarás más seguro que cuando estés en el centro de la voluntad de Dios. Jesús fue a la cruz pero Dios lo resucitó, Judas rehuyó al discipulado y terminó colgado de un árbol. Nunca es el mejor camino elegir la senda ancha.
Señor no permitas que sea fascinado por una lealtad menor, Yo soy alguien que sirvo a la Voz de Dios y no hago caso de las voces que quieran apártame de la senda del Nazareno. Amén.
