La primera noche que llevamos a Damaris al Sanatorio nos ocurrió algo. Eran las cinco de la madrugada y en la guardia nos dijeron que debíamos esperar que había un caso de urgencia que acababa de entrar. Estábamos medio dormidos, preocupados por la salud de Dama y con ganas de hablar poco como es habitual cuando recién te despiertas. De pronto, una mujer se sentó a nuestro lado y quebrada comenzó a sollozar en silencio. Nos miramos entre los tres y entendimos… Patry se levantó, se sentó al lado de ella, se interesó por su dolor y oró pidiendo un milagro para su hija… En eso la llamaron y se fue… ¿será que Dios usó la salud de Damaris para que hubiera tres hijos suyos intercediendo por esa familia? Yo creo que sí. 

Mr 5: 18 Al entrar él en la barca, el que había estado endemoniado le rogaba que le dejase estar con él. 19 Mas Jesús no se lo permitió, sino que le dijo: Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti.

Lo que este hombre había vivido era muy fuerte. Jesús hacia un par de horas lo había liberado del yugo opresor de una legión de demonios que lo había obligado por años a vivir segregado, desnudo, hiriéndose y vociferando por los sepulcros y las montañas. Lo conocían como el “loco” y su vida era un infierno. Por eso cuando Jesús piso la orilla, él respondió a un impulso del mundo espiritual violento que lo dominaba y corrió y se arrodilló. Los demonios aunque rebeldes y desafiantes ante las criaturas de Dios reconocen y se doblegaron ante la autoridad del Hijo de Dios. Él, vio por primera vez que aquello que lo sometía, someterse a alguien… 

Jesús, entonces, le dio una orden a los demonios, como cuando uno le dice a su perro que se vaya al rincón… así, los demonios salieron a tropel de su cuerpo y por primera vez en años se sintió libre, libre para ser. Dice la Biblia que ahí no más, fue vestido, fue sociabilizado y recupero su cordura. Tremendo milagro, tremendo beneficio. Este hombre ahí sentado a los pies de Jesús, decidió que lo seguiría el resto de su vida. Es por eso que cuando Jesús es expulsado y se sube a la barca, él quiere ir con ellos… pero Jesús no se lo permitió. 

¿Por qué Jesús no lo dejó subir a su barca? ¿Qué cosa mejor puede haber para un discípulo que estar con Jesús? Jesús le dice que si no lo lleva consigo es porque tiene una misión. 

¿Podemos ver reflejada en esta historia el porque usted y yo estamos en este mundo? Si no lleva con él es porque tenemos una misión. 

No estamos en esta tierra para pasar horas ministrándole, no estamos en esta tierra para escribirle canciones de amor, no estamos en esta tierra para producir beneficios que nos ayuden a tener más templos e instituciones, todas estas cosas maravillosas que hacemos son beneficios colaterales, nosotros estamos en esta tierra para cumplir la misión. ¿Cuál es?

Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti.

Es sin duda la evangelización, el contar las cosas maravillosas que Dios ha hecho con nosotros, la razón por la cual estamos en esta tierra. Sin lugar a dudas, la misión es tan importante que los discípulos cruzaron el mar, soportaron una tormenta, todo, para ganar este hombre para Dios. Esa la razón por la que pienso que esa madrugada, Dios nos llevó al Sanatorio Parque para orar a favor de esa mujer y su hija… La misión, eso es latido del corazón de Jesús. Por esa misión el Hijo de Dios dejó su trono, fue hecho hombre y murió en una cruz… todo para salvar a los hombres, no hay nada más importante que la misión. 

Anoche prediqué y cuando terminé mi mensaje, estaba en dudas… ¿hago un llamado o no? Y allí el Espíritu Santo me volvió a impulsar y me dijo: Siempre… Nada es más importante que la misión… Contar del amor de Dios, ganar a las personas para Cristo…

Orfilio, el pastor de nuestra iglesia oraba cada mañana: “Señor, concede a tu siervo que tenga hoy buen encuentro”… decía esto pidiendo encontrar a alguien a quien hablarle del amor de Dios. 

Muchos saben que hemos empezado a incursionar en política, lo hacemos porque Dios nos ha marcado ese rumbo, de hecho mi esposa es ahora candidata a primera diputada por la provincia de Santa Fe. Lo curioso es que muchas veces haciendo política nos encontramos con el dolor de la gente… ¿y que hacemos? ¿No mezclamos los tantos? No, nada hay más importante que la misión… Oramos por las personas… somos ante todos gente transformada, como el gadareno, que tiene una misión. 

Tenemos un canal de noticias y también allí nos encontramos con el dolor de las personas… ¿qué hacemos? ¿somos objetivos? No, nada es más importante que la misión… Oramos por las personas, nos empatizamos con ellas, somos gente transformada, como el gadareno, que tiene una misión. 

Cumplamos hoy nuestra misión!!!

Señor, concede a tu siervo que tenga hoy buen encuentro. Amén.