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Dia de reconexión 2322 - Cuchillos afilados.

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Jos 5:9 Entonces el Señor dijo a Josué: Hoy he quitado de vosotros el oprobio de Egipto. Por eso aquel lugar se ha llamado Gilgal hasta hoy.

 

Si Israel en Egipto me representa bajo el sistema mundo. Si la pascua habla del sacrificio vicario de Jesús y el cruce del mar Rojo habla de mi pasaje del reino de la tinieblas al reino de Dios cuando cruce el mar Rojo de su sangre derramada en la cruz. Si el desierto habla de ese tiempo de nuestra vida donde vamos experimentando la mudanza en nuestra experiencia de una mentalidad de opresión a una mentalidad de libertad. Si la entrada a la tierra prometida nos habla de esa época de la vida cristiana donde decidimos conquistar aquello que ya nos ha sido prometido… Si todo eso es así, Gilgal me habla de cuando por fin me decido a cortar con el oprobio de una vida de pecado y vivir una vida de pacto. 

La palabra oprobio significa vergüenza publica, deshonra. Hay una manera de vivir que aunque era normal y común en nuestra anterior manera de conjugar la existencia, sin Dios y sin esperanza en el mundo, hoy ya no podemos verla como viable. 

 

1 Co 6:9 ¿O no sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No os dejéis engañar: ni los inmorales, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, 10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores[d], ni los estafadores heredarán el reino de Dios. 11 Y esto erais algunos de vosotros; pero fuisteis lavados, pero fuisteis santificados, pero fuisteis justificados en el nombre del Señor Jesucristo y en el Espíritu de nuestro Dios.

 

Hay una vergonzosa manera de vivir que resiste a nuestra conversión y que se nos queda, como abrojos, adherido a nuestra vida. A pesar de ser cristianos, vivimos con códigos de otros tiempos. Sin embargo, llega un momento en donde el desierto se nos hace intolerable y queremos entrar a la tierra de la promesa… ese es el momento donde Dios dice: “Háganse cuchillos afilados”. Se hace menester en esta etapa de la vida cortar con cosas que hemos tolerado en nuestra vida, que hemos escondido detrás de hombros encogidos cada vez que nos presentamos ante Dios. 

Israel durante 40 años no había circuncidado a la generación del desierto y ahora debía hacerlo. No podemos ingresar a la abundancia de la promesa, ni enfrentarnos a la lucha con el enemigo sin un pacto de santidad… Hay cosas que deben ser cortadas de nuestra vida.

En Efesios 5 Pablo magistralmente expone cual es el estándar del creyente:

3 Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos; 4 ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias. 5 Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios. 6 Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia. 7 No seáis, pues, partícipes con ellos. 8 Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz 9 (porque el fruto del Espíritu es en toda bondad, justicia y verdad), 10 comprobando lo que es agradable al Señor. 11 Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas; 12 porque vergonzoso es aun hablar de lo que ellos hacen en secreto.

 

Hazte cuchillos afilados, es la orden del Espíritu para hoy. Viene un tiempo de gloria pero debemos cortar con conductas que no se pueden conjugar con nuestra condición de cristianos. Ya no más…  es tiempo de detenernos como Israel en los llanos de Jericó y hacer allí cirugía y cortar el oprobio de Egipto… eso que nos avergüenza, eso que nos es carga… debe rodar. “Santificaos, porque Jehová hará mañana maravillas entre vosotros”.

 

Señor, déjame soltar esos juguetes, esos “permitidos”, esas cosas que ya no son opción, quiero ir por aquello que me prometiste, estoy cansado del desierto, salgo de él y pago el precio del pacto haciendo rodar, haciendo un corte con aquello que me avergüenza… en tu nombre, Amén.

Pr. Daniel Cattaneo

Pr Daniel Cattaneo

 Soy Daniel Cattaneo, Pastor principal de Iglesia Redentor, Apóstol, Conferencista Internacional. Te invito a mi blog para que puedas ser bendecido con la palabra de Dios, por medio de los devocionales que comparto. Dios te bendice!

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