Ro 1:10 Siempre pido en mis oraciones que, si es la voluntad de Dios, por fin se me abra ahora el camino para ir a visitarlos.

Hch 28:30 Durante dos años completos permaneció Pablo en la casa que tenía alquilada, y recibía a todos los que iban a verlo. 31Y predicaba el reino de Dios y enseñaba acerca del Señor Jesucristo sin impedimento y sin temor alguno.

Así inicia el libro de Romanos y así termina el libro de los Hechos. Por cuestiones de orden quedaron uno al lado del otro y esta mañana al terminar Hechos y al empezar Romanos el Espíritu me dijo: Dios contesta las oraciones aunque no siempre como queremos…

Pablo rogaba ir a Roma y Dios le dijo que si… pero fue como prisionero. Estoy seguro que Pablo no oro eso… Nadie Ora: Señor quiero ir de misionero a tal lugar, déjame que me tomen preso, me hagan estar tres años en una celda sin juicio, por favor deja que de tanto en tanto me llamen para una pantomima de juicio y luego me vuelvan a dejar en la celda, no te olvides de llevarme en un barco, que se desate una tormenta, que estemos perdido tres días y tres noches en alta mar, que naufraguemos, que salga en una tabla escupiendo agua y no te olvides… cuando salga que me pique una víbora!!!! Nadie ora así.

Pablo oraba ir a Roma a predicar… quería ir hacia occidente, quería ir a Tarsis, por esto de ir hasta el fin del mundo… Así que debe haber orado déjame ir a predicar a Roma y después déjame ir hasta España para cumplir la gran comisión… Amén. 

Dios, que oye cuando oramos, contestó, Pablo fue a Roma pero en calidad de prisionero. Algunos dicen que fue liberado poco después y llegó a Tarsis y que de regreso fue vuelto a encarcelar y esta vez, le cortaron la cabeza. 

La bendición de la oración es que podemos tener la certeza que Dios nos oye y nos contesta de acuerdo a su amor y a su propósito eterno. 

Doy gracias a Dios que no ha hecho miles de cosas que, sin sabiduría, he pedido y agradezco que haya hecho millones que si le pedí, pero a su manera… 

Ro 8:26 Así mismo, en nuestra debilidad el Espíritu acude a ayudarnos. No sabemos qué pedir, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras. 27 Y Dios, que examina los corazones, sabe cuál es la intención del Espíritu, porque el Espíritu intercede por los creyentes conforme a la voluntad de Dios.

Pablo hablándome a los mismo romanos les dice que cuando oramos, lo hacemos desde nuestra debilidad. Desde nuestra falta de sabiduría, desde nuestro apremio angustiante, con nuestras fuerzas consumidas, con el dolor de nuestro cuerpo, con la pena por esa persona que amamos y sufre… desde nuestra escenario de debilidad oramos y el Espíritu toma nuestra oración y la remodela para poder así llevar nuestra vida a su divino proyecto. Por eso Pablo se anima a decir en el mismo capítulo que:

28 Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman,

Es increíble, todo me ayuda a bien. No quiero pensar en cuando Dios obra de acuerdo a lo que pedimos, esas respuestas no son nuestros problema, son las otras. 

¿Cuáles? 

Ore para que mi hermano se sane y partió con el Señor…. Tranquilo esto será a favor de todos. 

Ore para que ese trabajo repunte y ahora estoy subsistiendo… Tranquilo hay una fuente de riqueza en esa labor independiente. 

Oré para que Dios me haga ir a Roma y ahora estoy prisionero… Tranquilo, Pablo, irás a Roma… pero así es mejor. Mejor?!!! Si tenes que hablarle a unos reyes para que el día de mañana no digan que no tuvieron oportunidad, tenes que escribir algunas cartas que voy a necesitar para algo que se va a llamar Nuevo Testamento, tenes que salvar  la tripulación de un barco que si lo dejo al capitán los ahoga a todo, además necesito que pases por una isla para que el Principal de la Isla de Malta conozca a Dios, su padre se sane y los enfermos de la isla sean sanados… sé que es medio incomodo el viaje, no es en primera, pero tranquilo hijo, irás a Roma.

Estoy seguro que Pablo no pidió explicaciones pero si Dios se las hubiera dado, habría dicho amén. Dios oye mi oración y la contesta de acuerdo a su amor y propósito para mi vida. Hoy oro con esa convicción. 

Señor, oye mi oración y contéstala de acuerdo a tu amor y propósito para mi vida. Te lo pido en el nombre de Jesús, Amén.